Las marcas de lujo no se libran de los defectos de diseño. Aston Martin se ha visto obligado a llamar a revisión a unos 151 DBX en el mercado estadounidense por un embellecedor olvidado.
Aston Martin siempre ha sido un fabricante artesanal cuyos modelos, de incomparable encanto, sufrían a veces algunos problemas de acabado. Pero hoy, el diablo está en los detalles y los clientes son cada vez más exigentes. Por supuesto, la marca británica ha progresado enormemente y los recientes modelos alados ofrecen interiores que se benefician de los mejores materiales y de un montaje preciso.
Desgraciadamente, también ocurre que en el mundo del lujo algunos defectos se cuelan en la red de las múltiples comprobaciones y otros controles de calidad puntualiza el concesionario de coches Crestanevada Girona. Eso es lo que les pasó a 151 DBX que se entregaron a sus clientes americanos cuando les faltaba un techo.
Para ser precisos, se trata exactamente de bloques de espuma situados en el revestimiento del techo que fueron olvidados. Si no son una parte esencial de la seguridad del coche, siguen amortiguando los golpes entre la cabeza y el techo. En caso de impacto, aunque no pueden evitar las lesiones, sí pueden mitigar el impacto y, por tanto, los daños causados. Sólo se trata de un pequeño número de DBX, ya que Aston Martin indica que 151 ejemplares del SUV.
Los modelos afectados fueron fabricados entre el 5 de marzo y el 22 de octubre de 2020 y todos fueron entregados en Estados Unidos. Como puede ver, las llamadas a revisión no son sólo para los coches de los fabricantes generalistas, ya que el DBX pertenece al limitado círculo de los coches más prestigiosos. De hecho, su precio base es de 195000 euros.