El sector minorista de la alimentación ha experimentado enormes cambios desde hace bastante tiempo, que se vieron acelerados por la era de las pandemias y los hábitos que se desarrollaron en ella.
Esto ha afectado al perfil de cada persona compradora de esta industria, lo que significa que se han producido cambios subsiguientes en la forma en que se gestionan los negocios de esta industria, empezando por su producción, cumplimientos, adquisición y gestión de adquisiciones, marketing, gestión de inventarios, servicio proactivo al cliente, etcétera.
Por ejemplo, durante el COVID y su bloqueo, todos estábamos acostumbrados a ver artículos agotados en tiendas de comestibles y supermercados, lo que nos llevó a comportamientos de acumulación de existencias. Esto creó nuevos retos de gestión de inventario para los propietarios de las empresas de este sector.
Hoy en día, los consumidores tienen nuevas expectativas de las empresas del sector de los supermercados y las tiendas de comestibles que van más allá de la disponibilidad de los productos y la calidad de las experiencias en la tienda y en línea. Esto significa que, para que su empresa sobreviva en este sector tan cambiante, dedicado en gran medida a los productos perecederos, deberá contar con una estrategia empresarial adaptable que garantice que sus productos estén disponibles cuando los consumidores deseen adquirirlos.
Esto, sin embargo, no es tan sencillo como parece, ya que necesitaría actualizaciones en tiempo real de su inventario, ventas, fechas de caducidad, disponibilidad de existencias restantes e incluso información sobre las demandas de los consumidores a la espera, por lo que es imprescindible contar con un buen software TPV supermercados.